Nunca se termina de aprender!...

www.growth.cl


...Mi trabajo es hacer preguntas poderosas…y movilizar a las personas, desde un punto de inercia, de comodidad y confort, a otro espacio, de aprendizaje y nuevas posibilidades...

jueves, 1 de septiembre de 2011

Que no despierte el gigante!!!...




El gigante dormido, ese que habita dentro y que por mas dormido que esté, mantiene atemorizados a los dueños de casa.

¿Qué puede ser mas aterrador que vivir con un gigante al cual se ha tildado de "destructivo" "imperioso" "desolador"?

Mantenerlo dormido se ha transformado entonces en un arte, un juego, una jugada necesaria para continuar con el devenir y con lo cotidiano.

En el juego de no despertar al gigante puede parecer útil como estrategia exacerbar el opuesto a la parte dormida. Si mi gigante dormido es mi Pena, moverme en la extrema alegría quizá sea la fórmula aprendida para que esa pena nunca despierte. Si mi gigante dormido es el Miedo, probablemente un actuar temerario o demostrar fortaleza extrema nos parezcan el mejor somnífero.  

La jugada llega en ocasiones a cobrar un carácter evitativo: no lo nombro, no lo reconozco, rehuyo las circunstancias y situaciones en que el gigante aparezca o aquellas que me lo recuerdan, no le permito expresarse, hago como si no lo veo, no lo escucho y no le hablo.

El gigante dormido representa toda parte de mi que no quiero aceptar. Esa parte de mi que prefiero dormida. Toda parte con la cual no he aprendido a relacionarme aún positivamente. Aquella parte de mi que no logro gestionar, o por falta de conocimiento o por haber recreado un juicio particular de ella que no me permite mirarla apreciativamente.  El desgaste que provoca mantenerlo dormido es tremendo, equivalente al de cientos de liliputienses amordazando al titán. Cuanta energía mal gastada...si en algún momento el gigante igual se levantará!

Se me ocurren otros gigantes...el de la Rabia, el de la Culpa, el de la Soberbia, el de la Indiferencia...
Cuáles conoces tu?

El gigante dormido se alimenta y crece dada mi particular forma de relacionarme con el. Crece gigante de tanto probablemente guardar y almacenar aquello que no quiero ver ni escuchar. Es aquella parte entendida como mas oscura en nosotros a la que no le hemos permitido mostrarnos su "para que".

Todos tenemos o hemos tenido uno dentro...
¿Cuál (cuáles) es tu gigante dormido? aquel que no quieres despertar...
Cómo te relacionas con él? ¿te da miedo, te da rabia, te da pena tu gigante....?

Y ... que tanto podría pasar si el gigante despierta?
Será que has exagerado las consecuencias?
No sería mejor dejarlo expresarse... si se ha alimentado tanto tiempo de nosotros... seguro nos conoce bien.

No sea cosa que estemos equivocando al personaje. Y que aquel gigante espeluznante que crees tener ahi dormido sea mas bien el ser grande que hay en ti. He visto miedos transformados en consciencia, culpas transformadas en consideración, rabias transformadas en legitimidad y asertividad, penas transformadas en protección y cuidado por el otro.

Vamos!!! ATREVETE!!!!
Deja que despierte el gigante!!!
Pero despiértalo tu, como a un niño.... cariñosamente...

2 comentarios:

Rodrigo Silva Ortúzar dijo...

Muy movilizador...
...aun me cuesta identificar bien cuál es el mío.

Cariños mi querida partner!!!

Maricel Chinchón Romo dijo...

Está entonces muy dormido... :)